Desde pequeña he sentido una conexión especial con las personas y un deseo profundo de ayudarlas. Esa pasión me llevó a estudiar Trabajo Social, pero fue en mi camino académico donde descubrí el Reiki. Mientras investigaba terapias alternativas para mi proyecto final, esta técnica milenaria me cautivó por completo. Sentí que había encontrado algo más que una herramienta de sanación: era un estilo de vida que resonaba profundamente conmigo.

Comencé a practicar Reiki inicialmente para mejorar mi propia vida, superar la ansiedad y encontrar paz interior. Poco a poco, fui extendiendo esta práctica a mi círculo cercano, y los resultados no se hicieron esperar. Ver cómo familiares, amigos y clientes transformaban sus vidas a través del Reiki fue lo que me impulsó a dedicarme por completo a este camino. Hoy, estoy aquí para compartir contigo todo lo que esta maravillosa técnica puede ofrecerte, ayudándote a conectar con tu esencia, equilibrar tus emociones y encontrar el bienestar que mereces.